24.7.08
23.7.08
Caer para creer
Me aposté con el insomnio varios sueños, volví a perder
Se enmarañan mis pestañas, los ojos se niegan a ver
Dos pupilas que no mienten, que no habrá día siguiente
Lo que estaba bien, lo que estaba mal
Yo cansado de esperar pregunté: dónde vas
Dónde voy a ir, a robarte la vida otra vez
Mientras sigues pintando ese cuadro de gris"
21.7.08
18.7.08
17.7.08
Entre agujas y cicatrices
Entre agujas y cicatrices
Desnudé con la mirada aquel cuerpo de papel y tinta que reposaba sobre el ébano de mi buró, olisqueando el olor que emanaba de los bordes amarilleados con el paso de los años.
Pude tomar una bocanada del aire que se viciaba entre aquellas paredes de piedra y astillas antes de sentirlo entre mis manos una vez más.
La tinta corría por las apergaminadas páginas musitando historias pasadas, jactándose de mi fachada de hombre demolido por el tiempo.
Hojeando con desdén aquel amasijo de recuerdos y frases inacabadas, así la pluma entre los dedos y la deslicé sobre el lienzo de mi vida abriendo nuevas cicatrices sobre las cuartillas.
Nunca más volvió a llorar tinta, y es que el tiempo todo lo muda, todo lo ensarta en sus agujas de realidad, asesinando el recuerdo.
16.7.08
15.7.08
Procesando
El cielo se despertó plomizo y pesado aquella mañana de Agosto. Las nubes enmascaraban aquel azul pálido amenazando a tormenta. Mientras, el olor a salitre y un aire bochornoso que mecía las cortinas con tedio impregnaban aquel lugar.
El sonido del despertador y el aire viciado de la habitación me despertaron.

...
– ¿En qué piensas?
– ¿De verdad quieres saberlo?
– Estás demasiado callado.
– No pienso en nada.
– No me mientas…
– A veces es mejor limitarse a disfrutar del momento.
14.7.08
...
– Quiero llevarte a un sitio.
– ¿A dónde?
– ¡Ya lo verás, confía en mí!
– Sabes que me dan miedo las alturas.
– Desde arriba se ve todo muy pequeñito, parece que puedas tomarlo todo en la palma de tu mano y hacerlo desaparecer.
– ¿Porqué te empeñas en destruir todo en lo que creo?
– Porque todo es mentira.
[Silencio]
–¿Subes?
Tan como siempre
Tenía la mirada perdida y soñadora, como siempre apuntando hacia el cielo. Se había acostumbrado a ser una sombra en un mundo de luces que intentaba deslumbrar con sus quimeras los ojos de los necios que no querían ver.